Todos los periódicos tienen una sección fija para el horóscopo y nada ni remotamente parecido para la ciencia. ¿Y después de dónde sale tanto hippie antivacuna?
Siguiendo una ya vieja tradición, vamos hacerle fact checking a médiums, videntes, brujos, numerólogas y demás especies que suelen poblar el fin de año para –inevitablemente– fracasar más que periodista de Cuarto Poder.
Como es evidente, tenemos que empezar por Hayimi. El pobre no pudo predecir que él mismo estaría en el centro de un escándalo político, cuando se descubriera, en febrero de 2021, que visitaba a Vizcarra y, luego, que jugaba en pared con Karelim. En vez de preocuparse por su propio futuro, hace un año el médium aseguró que las vacunas llegarían recién en agosto, que volveríamos a la cuarentena, que Paolo Guerrero tendría un nuevo hijo con su actual pareja, que las elecciones se postergarían y que una mujer sería presidenta. Impresionante. Ahora se entiende cómo es que Vizcarra no vio lo que se le venía encima.
Hayimi también pronosticó que la selección no clasificaría a Qatar. Y tuvo razón. Básicamente porque ese momento se ha postergado para este año.
Lo mismo aseguró en Canal N, la «numeróloga» Diana Palomino, quien veía «el fin de un ciclo» de nuestro fútbol, con el consecuente alejamiento de varias figuras. Coincidió con ella, en esa misma nota –que también fue transmitida en América Noticias–, la «vidente» Carmen Briceño quien fue más directa y agregó que Gareca «va a dejar de ser nuestro profe». Ella también coincidió en que las elecciones serían pospuestas por la pandemia.
Por el contrario, en el mismo informe, el «cosmobiólogo» (?) Rubén Jungbluth más bien pedía que los comicios se posterguen, especialmente porque «no veía» que Sagasti terminase su gobierno. Lo mismo aseguró, sentada con Nicolás Lúcar, la «rumpóloga» Bibian Arango que en sus cartas no veía «que me termine el mandato, definitivamente». También aseguró que Forsyth «iba a remontar».
Volviendo a Briceño, fue gracioso que dijera que el próximo presidente «no es joven, es reconocido mundialmente, es autor de grandes obras y es muy preparado», mientras el reportaje ponía imágenes de Hernando de Soto.
Sobre apuestas electorales, la «astróloga» Pochita –que cuenta con una sección diaria en uno de los diarios del Grupo El Comercio– también apostó por De Soto y, para asegurarse un poquito, Julio Guzmán (también dijo que se vacunaría solo en Lima y no en el resto del país; parece que le encantan las predicciones a medias).
Otro que apunto a dos para achuntarla fue el señor Jungbluth, en otra entrevista. Hace un año, aseguró que le próximo presidente del Perú sería «Acuario» y eso lo llevó a reducir todo a Lescano y López Aliaga. Eso sí: aseguro que, gane quien gane, lo iban a sacar pronto de Palacio, a menos que juramentase a la hora precisa que él le iba a decir. Es posible, claro, que Castillo le haya pegado una llamada, porque hasta ahora –literalmente contra todo pronóstico– el presidente sigue siendo presidente.
Lo mismo le pasó a la «coach» y «maestro reiki» Rosa María Cifuentes, que hace poco estuvo emocionando a los ilusos televidentes de Willax asegurándoles que Castillo no pasaba de noviembre. Los willaxeados hasta ahora le siguen reclamando haberlos ilusionado.
Esto, por cierto, es un contraste de 180 grados en su actitud. Hoy la señora Cifuentes es una caserita de la DBA, que la utiliza para lanzar argumentos frenológicos en contra de sus bestias negras. En cambio, hace un año más bien pedía que «dejen trabajar» al nuevo gobierno y veía con ilusión que todos los que entrasen fuesen rostros nuevos. También aseguró que en marzo del año pasado, «algunos colegios» empezarían a volver a clases; que habrían muchos «juicios televisados» y que se daría una ley para dar «una fuerte sanción» a los haters online.
Algo que resulta interesante es que los espacios que consultan a varios videntes, nunca destacan las contradicciones entre sí. Esto pasó en el programa «La hora esotérica» de Radio Exitosa. Allí, la «angeóloga» Soralla De Los Ángeles pronosticó que las vacunas recién iban a llegar a mitad de año. En cambio, el «vidente» Robert Granda aseguraba que sería antes y que «en marzo no creo que ya usemos mascarillas». Este mismo señor aseguró que «Julio Guzmán podría dar la sorpresa». Se quemó.
Pero nadie más quemada que Agatha Lys que aseguró que un meteorito chocaría con la Tierra (quizás sus visiones tienen suscripción a Netflix), que podríamos «hablar con animales con la mente», que los robots «formarán parte de la vida cotidiana», que Donald Trump aceptaría su derrota, que Carlos ascendería al trono de Inglaterra, que Forsyth era el candidato con mayor probabilidad de éxito y que –agárrense– el Apra demostraría que está renaciendo.
Si ven que Forsyth es un nombre que se repite, la explicación es muy simple: hace un año estaba primero en las encuestas. Por eso es que nuestro engreído, Reinaldo Dos Santos, también apostó por él en una extensa transmisión difundida en ATV. Por cierto, él también habló de «una roca gigante» que venía a la Tierra. Quizás compartía cuenta de Netflix con Agatha Lys. A pesar de eso, en lo que tiene que haber sido una broma cruel, anunció que el 2021 sería «un año muy bueno». Meh. Quizás, gracias a tanto crédulo, para él sí lo fue.