Parece que tengo que agradecer que ni la resolución 1080 haya sido suficiente para que ustedes hayan notado algo distinto en mí durante el programa del martes. Pero la gente que sí me vio en vivo ese día sí que notaron algo distinto y aquí estoy todavía. En principio, no se preocupen. No parece ser nada demasiado grave pero no tengo idea cuándo volveré a la conducción del programa. De todas formas, como siempre he dicho, en La Encerrona “Marco Sifuentes” es simplemente un seudónimo que abarca a las cinco personas que hacemos el programa. Por eso es que habrán notado mi ausencia, que muchos han estado cuestionando en estos momentos tan difíciles para nuestro país. Créame que me encantaría estar al pie del cañón. De todas formas, en estos días, La Encerrona parece estar siendo hecha por ocho personas porque los cuatro que quedan han redoblado los esfuerzos, y eso se nota. Con un poco de suerte estaré con ustedes antes de navidad y, si tenemos más suerte aún, para entonces las aguas podrían haberse calmado. Y solo por esta vez me encantaría volver en una coyuntura que me obligue a hacer el programa más aburrido posible. Sería mi mejor regalo de fiestas. Nos vemos.
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